Día de La Luz "Las Carreras de Caballos" en Arroyo de la Luz 2014.
Declarada Fiesta de Interés Turístico Regional desde 1997, es la Fiesta Mayor de Arroyo, celebrada en honor a su patrona, la Virgen de la Luz, cada Lunes de Pascua.
La leyenda cuenta que un atardecer de primavera de 1229, en plena Reconquista, siendo rey de los cristianos Alfonso IX de León, en las inmediaciones del llamado Pozo de las Matanzas, en la Dehesa de la Luz, los cristianos y los moros luchaban en feroz combate. La batalla se prolongaba hasta caer la noche y fue entonces cuando una luz, la de la Virgen, apareció sobre una encina, cegando a los musulmanes e iluminando a los cristianos, que consiguieron así ganar la batalla, al amparo de la luz de la señora, agradecidos le levantaron una ermita en la Dehesa.
En el Archivo Parroquial hay un documento de 1557 en que se nos cuenta como se celebraba el Día de la Luz. El Obispo de Coria, Don Diego Enrique de Almansa, gran amigo de San Pedro de Alcántara, se encontraba en Italia asistiendo a las sesiones del Concilio de Trento. En su nombre hace la Visita Pastoral en Arroyo el Doctor D. Pedro Salcedo, canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Coria. Estaba en Arroyo por la Semana Santa de aquél año y asiste a la Fiesta El Día de la Luz. Nos lo dice en el acta que levanta el Secretario del Visitador con la belleza del idioma de la época:
“Aviendo visitado el Señor visitador la dicha hermita de la Luz e aviéndose hallado en ella el segundo día de Pascua de Flores que es el día aquesta Villa tiene devoción de ir en procesión a ella hallo que tenga gran necesidad de abrirse una puerta a la parte del mediodía a donde al presente tiene un altar en el que solidan decir Misa en dicho da fuera de la dicha hermita”.
A lo largo de los siglos ha ido cambiando constantemente la forma de celebrar el Día de la Luz.
Los arroyanos iban en procesión hasta la ermita de su patrona, y posteriormente en carros y en carretas. Ese día la Misa se decía al aire libre, de campaña, en un altar que estaba situado en uno de los lados de la ermita.
Las Carreras de caballos fueron una consecuencia normal de la Fiesta. Los hombres volvían de la romería con sus caballos enjaezados y sus mujeres a la grupa. La gente del pueblo salía a la calle principal, la Corredera, a ver y a disfrutar del espectáculo del colorido de jinetes tan vistosos y damas tan engalanadas.
Así nacieron las ya famosas Carreras de caballos del Día de la Luz.
Otra versión es que los moros, derrotados, huían corriendo a caballo por la calle Corredera mientras que los cristianos los perseguían. Y también se habla de los cristianos corriendo por la misma calle para dar la noticia en el pueblo, de su victoria frente a los moros.
En la actualidad, el Día, se inicia con la procesión festiva, o cívico religiosa, que sale de la Parroquia de la Asunción, en la plaza mayor a las nueve de la mañana, encabezada por la Cruz Parroquial con todas las banderas, pendones, estandartes e insignias de santos y cofradías.
Sigue el clero y detrás todas las autoridades locales, acompañados por una banda de música. Los vecinos salen a la Plaza y a la calle principal, La Corredera, que son el itinerario de esta procesión o desfile, que llega hasta la plaza de San Sebastián, de donde sale la procesión con la Virgen de la Luz en medio de la emoción, los aplausos de la gente y las lágrimas de un pueblo que quiere a su patrona entrañablemente. Ya en la ermita de la Luz, hay misa solemne con sermón y una vez terminada la celebración religiosa se vuelve al pueblo. A las doce de la mañana comienzan las carreras. Los caballos son lanzados a todo correr por la Corredera, donde todos los arroyanos y visitantes pueden contemplar la pericia de los jinetes y los maravillosos y briosos corceles que corren. Las casas están abiertas y a la gente se le obsequia con vino de la tierra. Los caballos bajan una y otra vez desde la Plaza de San Sebastián a la Plaza Mayor. Esto hace de la fiesta un auténtico y emocionante espectáculo.
Desde hace bastante tiempo también se han incorporado a este desfile carrozas con motivos históricos, locales, típicos...
Para finalizar hay una procesión de regreso desde San Sebastián a la Plaza Mayor, cerrando la marcha los jinetes que han participado con sus caballos. Después se hace entrega de premios a los caballos y jinetes y a las carrozas.
Esto es, en síntesis, el DIA DE LA LUZ, la Fiesta Mayor de Arroyo de la Luz. Luego, a los tres días, se trae la Virgen al pueblo para el Novenario y, al final, la Romería en
los maravillosos campos de la dehesa de la Luz.