Fira d'Agost de XÀTIVA (Valencia)
del 15 al 20 de agosto de 2024
Consulte aquí el programa de la Fira d'Agost de Xàtiva
del 10 al 17 de abril de 2022
Consulte aquí los horarios, procesiones e itinerarios de la Semana Santa de Xàtiva
FIESTAS EN XÀTIVA-JÁTIVA
ENERO
Día 5 - Cabalgata de Reyes
FEBRERO
Carnavales
MARZO
Día 19 Fallas
Día 24 Domingo de Ramos
Día 27 Las Cortesías, celebrada la noche del Miércoles Santo
ABRIL
Semana Santa
Algunas imágenes son del Siglo XVII, son unas de las más importantes de la Comunidad Valenciana.
Pascua de Resurrección
MAYO
Ofrenda de flores a la Virgen.
JUNIO
Corpus Christi
Cabe destacar los Gigantes y Cabezudos acompañados de los bailes de la procesión y escenas bíblicas que acompañan a la Custodia.
JULIO
Fiestas del Barrio del Carmen
Fiestas de la pedanía de Annauir
Fiestas del Barrio de Sant Feliu
AGOSTO
Día 1 Sant Feliu. Patrono de Xàtiva.
Romería a la ermita del Santo.
Dia 5 Virgen de las Nieves. Patrona de Xàtiva.
Procesión mayor en honor a la Virgen.
Nits al Castell
Actuaciones de gran relevancia teatrales y musicales
Fira d'Agost. Una de las ferias más antiguas de la Comunidad Valenciana. Declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. El privilegio de poder celebrar esta feria fue concedido por Jaime I en
1250.
Corridas de toros
Tiro y arrastre
Durante la Fira d'Agost se realizan muchas actividades socioculturales
SEPTIEMBRE
Fiestas pedanía Torre d'en Lloris
Fiestas de Sant Gaetà
Fiestas viviendas Manuel Casesnoves
Fiestas carrer Blanc
Fiestas Caputxins
Fiestas de Ardiaca Baixa
Fiestas de l'Hort de Mora
Fiestas de Sant Cristófol y adyacentes
Fiestas Vernissa
Fiestas Grupo las Santas
OCTUBRE
Fiestas de Sant Pasqual día 1
Fiestas Sant Josep, Carneros y adyacentes primer fin de semana de octubre
Fiestas Ardiaca Alta y Menor Cuesta
Fiestas calle Puig
NOVIEMBRE
Todos los Santos
Caterinetes
DICIEMBRE
Belén a tamaño natural, representaciones y villancicos
Navidad
Misa del Gallo
Fiestas pedanía de Sorió
Desde 1250, año que el Rey Jaime I El Conquistador otorga desde Lérida a la ciudad de Xàtiva el privilegio de celebrar una feria de ganado, mayormente caballar, hasta nuestros días han transcurrido 749 años en que este fenómeno, de tan importante valor histórico, ha desarrollado su actividad ininterrumpidamente, si exceptuamos los obligados períodos de paréntesis por guerra, epidemias o catástrofes. Según el historiador Germán Ramírez, el período más prolongado sin feria en Xàtiva fue el que siguió al año 1707, en que las tropas de Felipe V quemaron la ciudad. Posteriormente, en 1855, como consecuencia de una epidemia de cólera, el alcalde de Xàtiva, Genaro Cantos, hace público un anuncio en los periódicos por el que suspendía la feria hasta que mejorara la situación sanitaria, cosa que no se produjo en el transcurso de aquel año. Con todo, la Feria de Agosto de Xàtiva se sitúa actualmente como la más antigua de las existentes en la Comunidad Valenciana.
De sus inicios a la actualidad, esta feria ha sufrido toda una serie de cambios, tales como que comenzó celebrándose en torno al día 11 de noviembre, por la festividad de San
Martín, en pleno otoño, no existiendo constancia exacta del año en que pasa a celebrarse el 15 de agosto y días sucesivos, coincidiendo con la festividad de la Asunción de Nuestra Señora, y por
tanto en mitad del verano.
Igualmente, ha sufrido cambios en su ubicación, puesto que comenzó situándose la actividad ferial junto al Portal de Cocentaina, en la entonces llamada plaza del mercado o de la
feria. Así la pared de la muralla que bordeaba la ciudad por el actual jardín del Beso, llegó a ser ocupada totalmente con los equinos. Con el paso de los años el crecimiento del espacio físico
de la feria llegó a abarcar el llamado Camí de Sant Antoni, junto a la carretera de Genovés. Desde esta parte de la ciudad fue desplazándose, por la incorporación de otras actividades
comerciales, bordeando la muralla, hoy ya inexistente, que delimitaba la línea de la Alameda. En agosto de 1887, el semanario local El Clamor Setabense reseña lo siguiente: Suntuosa promete
ser este año la feria. A la hora en que escribimos estas líneas se están construyendo casetas más que de prisa por los innumerables pedidos que hay hechos. Respecto al ganado se espera mucha
animación, pues, por los antecedentes que tenemos, podemos asegurar que superará este año el número de cabezas al de los anteriores y de éstas ha habido cuanto menos 12000 en cada feria.
En 1919, el Heraldo de Játiva indicaba en sus páginas: Lanzaos a la Alameda y veréis, desde el viejo y soleado paseo de San Antonio, paseo de paz y aires de montaña, con los
bancales de sus orillas ocupados por multitud de bueyes para la recría, de un ejército de toretes de mirar dulzón y aliñado, hasta la plaza de Emilio Castelar (hoy plaza de la Bassa) con
sus pilas de ajos para simiente y variados útiles de labranza, un enorme gentío que discurre pausado, barboteando la risa en todos los labios...
Desde finales del siglo XIX, cuando la feria, según consta, ocupaba una extensión de 3000 metros, de los que 2000 estaban dedicados a ganado caballar, vacuno y lanar, siendo los
1000 ocupados por casetas y barracas de combustible, objetos de agricultura, de loza, esparto, etc., hasta la actualidad en que la feria abarca todo el espacio comprendido entre la plaza de La
Bassa y la plaza de España, apiñándose las casetas, puestos de venta y atracciones hasta en seis líneas paralelas a lo largo de la Alameda, la superficie de espacio destinada a las actividades
comerciales de nuestra feria ha pasado a ser de 45.000 metros cuadrados, distribuidos por sectores en la forma siguiente: 7.000, situados frente al Instituto Josep de Ribera; para la feria
agrícola están dedicados 3.000 en la plaza de La Bassa y para los puestos comerciales restantes, incluidas atracciones, se destinan 35.000 metros cuadrados que ocupan totalmente las avenidas de
Jaime I y Selgas. Si a todo lo expuesto añadimos que los espacios escénicos para desarrollo del programa festivo y cultural, se encuentran situados en diversos puntos de la ciudad: plaza de la
Seo, Jardín de la Paz, Glorieta, patio del colegio Attilio Bruschetti, calle del Catedrático Ángel Lacalle, plaza de Sant Pere, y calle de Puig, plaza del Hort de Mora, pabellón municipal,
polideportivo, etc., concluiremos en que prácticamente toda la ciudad de Xàtiva está ocupada por alguna actividad ferial del 15 al 20 de agosto.
El carácter marcadamente comercial que adquirió la feria, llevó y sigue llevando hoy a que los sectores de actividad más destacados en cada momento de la historia, desde 1250 a nuestros días, hayan estado presentes en ella con la lógica evolución de la transformación económica de la ciudad. Desde aquellos primeros caballos dedicados a labranza, se ha pasado a ver hoy transacciones de animales de lujo, incorporándose en su situación la maquinaria agrícola. De la loza y el barro que exclusivamente adquirían los visitantes de las diversas localidades de las comarcas de La Costera, La Canal, Vall d'Albaida, Ribera, etc., para comenzar o renovar su ajuar, se ha pasado, sin perder totalmente su presencia, a la comercialización de estos mismos objetos en metal, plástico o fibra. De aquellos carruseles y barquillas impulsadas mediante complicadas poleas por la fuerza del hambre, se ha llegado hoy a las estruendosas y luminosas pistas de cochecitos. Junto a los tradicionales puestos de palmitos, que se resisten a desaparecer dada su notable aceptación, se pueden observar otros ofreciendo modernos ventiladores de cable o de pilas. En cuanto a los juguetes, sólo decir que aquellos feriantes que ayer nos ofrecieron el caballito de cartón o el triciclo de madera, hoy ellos mismos o sus sucesores nos presentan los últimos modelos de motos y coches de batería. Los tiempos han cambiado y la Feria, aún conservando mucho de su pasado, ha ido evolucionando al ritmo que los tiempos marcaban. De ahí que su aceptación continúe vigente entre las gentes que año tras año acuden a la cita.
Junto al aspecto comercial, convive en nuestra Feria la actividad festiva, deportiva y cultural. Así, se ha logrado transformarla en un lugar de encuentro de aquellos que acuden
estimulados no sólo por la oferta comercial, amplia y variada, sino también por la diversidad de su programación: fuegos artificiales, verbenas, corridas de toros, exposiciones, teatro, danza,
concursos... Todo ello en un abigarrado programa que comienza en la noche del 14 de agosto para finalizar en la madrugada del día 21.
Pero la Feria de Xàtiva no siempre ha tenido la misma duración ni la misma programación festiva. Así, aunque comenzó con diez días de actividad, se pasó después a tres a finales
del siglo XIX, y fue en 1890 de cinco días momento en que ocupa la alcaldía Ricardo Font. En 1925 hubo ocho días de programación de feria, puesto que finalizó el 22 de agosto, siendo alcalde José
Bataller. En 1930 se celebran del 15 al 20 exclusivamente, bajo la alcaldía de Julio Riu. Pero el siguiente año, 1931,con José Tudela de alcalde, la feria se prolonga por nueve días, del 15 al 23
de agosto. En 1933 comienza la feria el día 13 de agosto aprovechando que es domingo, aunque se inaugura el 14 por la noche y finaliza el 20, era alcalde, José Medina. Pasada la Guerra Civil
española, en 1942, se celebra la feria y fiestas del 14 al 23 de agosto, con la alcaldía ocupada por Antonio Villena. Al año siguiente, con Manuel Casesnoves como alcalde accidental, se prolonga
hasta el día 22 de agosto aprovechando que es domingo. En 1952, con Francisco J. Ansuátegui de alcalde, la feria se prolonga hasta el 24 de agosto, teniendo diez días de duración su programa. Con
Eugenio Blasco en la alcaldía, las ferias de los años siguientes pasan a ser de seis días y, a lo sumo, siete días oficiales de duración. Esto se mantiene con los siguientes alcaldes: Ignacio
Ansuátegui, y Eduardo Llagaria, para llegar en 1976, con Jesús Miguel Cuadrado, a ocho días, del 15 al 22 de agosto; posteriormente a siete días en 1977 y a seis en 1978. Con el retorno del
sistema político democrático, Manuel Casesnoves Soldevila inicia su mandato al frente de la alcaldía de Xàtiva dándole el nombre popular a la manifestación festiva: Fira d'Agost, con una duración
que se mantendrá fija hasta hoy: seis días, con la salvedad del año 1988 que, coordinada por Antonio Martínez Revert, se programan los festejos del 13 al 21 de agosto.
En cuanto a la programación de espectáculos, hecho que se produce para dar mayor aliciente a la estancia de los visitantes a la feria comercial, en un principio se circunscribía
a corridas de novillos, fuegos artificiales, verbenas y conciertos amenizados por las bandas de música locales: La Nueva, La Primitiva y La Banda del Regimiento de guarnición en Xàtiva. Los
fuegos artificiales se disparaban en la plaza del Españoleto hasta pasar al Jardín de la Paz y a donde hoy se efectúan: en el barrio del Carmen. Las primeras plazas de toros se
construían de madera, y, según consta en 1887, su confección y puesta en marcha costaron 9210 pesetas, recaudándose en los tres primeros días un total de 16549 pesetas. Posteriormente se
celebraron concursos de grupas y danzas del país.
Con el paso del tiempo se amplía la oferta de la programación de la feria, comenzando a denominarse cada día con el nombre de la actividad estelar de la jornada. Así, aparecen
en los programas el Día del Certamen Musical motivado por la importancia que este acto fue adquiriendo, ya que las bandas participantes llegaban por la mañana en ferrocarril y eran recibidas por
las bandas locales, que, juntas, iniciaban un recorrido por la ciudad a los sones de los compases para, ya por la tarde, realizar su actuación. El Día Infantil se confeccionaba con la
programación de diversos actos para los más pequeños; así en el Real de la Feria se disputaban carreras de patinetes para menores de 10 años, el concurso de trajes típicos para mayores de 8 años
y carcasas y los fuegos artificiales con lluvia de caramelos y juguetes que soltaban éstas al explosionar en el aire. El día de Ribera consistía en que el primer día de feria, aprovechando la
inauguración de los salones de arte, donde se exponían obras de pintura y de fotografía, el Consistorio se dirigía al monumento a José de Ribera para colocar una corona de laurel. El Día del
Motociclismo del año 1956, hubo pruebas de regularidad en moto por la mañana, por la tarde el campeonato regional de motorismo con el V Trofeo Feria en juego, y ya por la noche, a las 23 horas,
en el Real se organizó una jinkama motorista por la Peña Motorista Setabense.
Durante algunos años también se celebró el denominado Día de la Caridad, consistente en que señoritas de la ciudad recogían donativos, y conjuntamente con el Ayuntamiento,
ofrecían suculentas comidas el primer o segundo día de feria en los establecimientos benéficos de Xàtiva, como lo eran la Beneficencia o el Asilo de Ancianos Desamparados. El Día del Frente de
Juventudes, con diversos actos, generalmente juveniles y deportivos, fue el protagonista de muchas programaciones de feria en los años cuarenta y cincuenta.
De los concursos que se hacían en otros tiempos y que el paso de los años ha ido depurando, cabe destacar los realizados en la Glorieta de José Espejo en los años treinta, donde
organizados por la Comisión Municipal de Feria o por el Comité Central Fallero de Xàtiva se celebraban el concurso del mantón de Manila, el baile de la resistencia, el del vestido de cuatro
pesetas, el de peinados, el de elección de Mis Feo Setabense, ganado por Ricardo Angulo en 1934, o el del baile por parejas, a la vez que se desarrollaban las verbenas.
Otra actividad que proporcionaba el gremio de hostelería, apoyado por diversas casas comerciales del sector, era la carrera de camareros que partiendo del Real de Feria
daba la vuelta por la calle de Moncada para finalizar en el punto de partida, llevando, cada participante, una bandeja con un vaso repleto de líquido y una botella. Quien cubría el recorrido en
el menor tiempo y sin verter gran cantidad del vaso conseguía el premio. Recientemente y con la organización y patrocinio de la Asociación de Empresarios de Xàtiva -Adexa- se ha rescatado este
acto para el programa de feria.
Las noches de los años 40, 50, 60 y 70 eran en la feria motivo de celebración de concurridas verbenas en las terrazas del Casino Setabense y Círculo Mercantil, con gran
aceptación por parte de la ciudadanía, hasta que se hizo selectiva su asistencia, circunscribiéndose a los socios de los mismos y poca gente más.
Las competiciones deportivas, que comenzaron con las tradicionales carreras pedestres en el Real, dieron paso a toda la gama de deportes que se practican, puesto que incluso en los años cincuenta del presente siglo se disputó un partido de rugby en el Campo de Futbol La Murta entre una selección valenciana y el equipo de Tabernes de Valldigna, pero es el fútbol el deporte que más constantemente aparece en los programas de feria. En los últimos tiempos, el badminton, voleibol, fútbol sala, baloncesto, atletismo, tenis de mesa, ajedrez, etc., han ido incorporándose a las tradicionales carreras de ciclismo y de motos.
La presencia desde un tiempo no muy lejano a esta parte de espectáculos de marcado carácter cultural: teatro, zarzuela, danza y certámenes de bellas artes, así como el deporte y
espectáculo autóctono: tiro y arrastre, pelota valenciana (que no ha llegado a asentarse en nuestra Fira), la cançò, etc., han marcado la línea que actualmente se viene manteniendo en la
programación de la feria de Xàtiva, conjuntamente con el deporte, la música, los fuegos artificiales o la gastronomía, representada en la popular y muy concurrida Fiesta de la Paella.
Como un día dijera el escritor y poeta Blai Bellver:
La Fira més gran del món,
la més antiga quizà...
...hoy tiene ya tras de sí más de 750 años de vigencia, y ello implica mucha historia.
(Del Libro Fiestas y Tradiciones de Xàtiva. Josep Sanchis Martínez y Mª Lourdes Boluda Perucho. Premios Literarios Ciutat de Xàtiva 1999. Matéu Editores. Xàtiva 1999)
En Xàtiva, la tradición de plantar fallas viene, que se tenga referencia escrita, desde 1865, cuando en la Plaza de la Trinitat se exhibió el primer monumento fallero de nuestra ciudad, el
cual hacía alusión en su temática a la pesca de la anchoa para de esta forma satírica criticar otro tipo de pesca común entre ambos sexos. Llevaba por lema La Peixca de l'aladroch siendo su
difusor a través de un folleto impreso con la explicación de la misma, el industrial de la tipografía y prolífico escritor Blas Julian Bellver Tomás.
El año siguiente, 1866 con la falla y libro titulado La Creu del Matrimoni se produce la censura eclesiástica del mismo y la prohibición de ser plantada en las calles de Xàtiva dictada a
instancias del Arzobispo de Valencia, por el Capitán General de la zona. Este libro fue excomulgado y ordenada su retirada de la circulación. El año siguiente volvió a plantarse falla en la Plaza
de la Trinitat bajo el lema Eclipses del Matrimonio, siendo estas tres fallas las que, a falta de más estudios y documentos se consideran como las únicas realizadas en el siglo XIX en
Xàtiva.
Ya en del siglo XX -salvando una falla atípica en el año 1922 quemada en el Bellveret, que fue la Tortuga del Corpus- el momento de mayor esplendor de esta fiesta en Xàtiva se produce entre
los 1932 a 1936 donde año tras año va creciendo el número de fallas plantadas y por tanto de comisiones constituidas, llegando a abarcar todos los barrios existentes en la
ciudad.
Con la llegada de la Guerra Civil se corta una línea ascendente de la fiesta fallera en nuestra ciudad. Así cuando en 1941 se reinicia la costumbre de plantarlas, solamente una es la que se
quema. Después poco a poco volverá a tomar auge alcanzando, a mitad de los años cuarenta, un número de comisiones ya importante.
De entre las fallas que van incorporándose a la fiesta en Xàtiva, cabe destacar el 1946 de la Plaza del Mercado que consigue el primer premio, seguida de la de la Plaza del Cid -antes y
después, Plaza de la Trinitat- que obtiene el segundo. Las dos fueron construidas por Antonio Grau Tomás.
Entonces, las fallas se plantaban colocando inicialmente un largo pino, bien fuerte, en el centro de la plaza para hacer la equivalencia de caballete de hoy, al que se le iban añadiendo, de
arriba a bajo, las distintas piezas que configuraban la falla, atándolas a él. Cabe recordar que no existían las grandes grúas que hoy se utilizan en el montaje, así pues los andamios y escaleras
hacían posible que se pudieran levantar, con esfuerzo totalmente manual estas fallas, quedando listas en una sola mañana. También es cierto que no se incluían tantas escenas, ni muñecos como se
colocan ahora.
Los muñecos tenían el cuerpo de paja, vestidos con ropa de tela auténtica y las manos y la cara eran de cera no completamente virgen, lo que ocasionaba que los días de mucho calor, cuando
el sol era muy fuerte y los rayos caían encima de la falla, parecía que los muñecos sudaban al fundirse la cera.
Eran otros tiempos, con otras técnicas que al paso de los años irán superándose en bien y mejora de la falla.
Los años cincuenta comienzan con la falla Plaza de San Jordi o Galera ganando el primer premio en 1951; era una falla en la que el artista por medios manuales hacía mover ligeramente dos
brazos confeccionados de cartón y madera que salían de debajo de una reproducción del campanario de la Seo situado en lo alto de la falla. En aquellos tiempos las plataformas o bases eran
altísimas respecto del nivel del suelo.
El año siguiente,1952, fue el año de la Falla Foc I Flama -la falla viajera- de tan grato recuerdo entre los setabenses de la época, puesto que fue montada encima de la plataforma de un
camión por los entusiastas promotores de la Música Nueva.
En el año 1959, en la llamada, entonces, Plaza de Tetuán -hoy Porta de Sant Francesc- se planta una falla que obtiene el primer premio, realizada por el artista Morell y que lleva por
lema Foc i Flama como la anteriormente citada, aunque no tuvo relación una comisión con otra.
Los años 60 llevan la incorporación de nuevas comisiones de falla a la ciudad, que le dan un auge in crescendo. Esto es consecuencia de la expansión de Xàtiva hacía la vía del ferrocarril,
con nuevas edificaciones plurifamiliares que condensan gran cantidad de vecinos con ganas de fiesta fallera. Así, el Barrio del Carmen primeramente y la Avenida de la República Argentina,
comienzan a plantar falla en el año 1965. La primera, el Barrio del Carmen, con mejores resultados que posteriormente ha conseguido, ya que en 1962 obtiene el Primer Premio en falla así como el
de Mejor Ninot. La Falla República Argentina después de un primer año de novicia, pasa en el siguiente, 1966, a ganar su Primer Premio, lo cual ha venido repitiendo sistemáticamente, con unos y
otros artistas.
Mientras unas comisiones van creándose, otras desaparecen: la de la plaza del Españoleto que en 1966 viene a cubrir el vacío que dejará la Falla de la Plaza de la Balsa (entonces llamada
del Caudillo), la de la Plaza Benlloch reemplazará a la de la Plaza Enríquez.
Otras, establecidas en lugares de larga tradición en la plantada de fallas como la Plaza de San Jaime -antes Mártires de la Revolución- venía haciéndolo incluso en tiempos de la II
República Española, con algunas fallas que se denominaban entonces de la plaza Méndez Núñez. Otra falla con altibajos en cuanto a presencias y ausencias en su historia y que en los últimos años
se ha llegado a consolidar, es la del Raval que ha llegado a ganar primeros premios en años consecutivos.
Comisiones como la de San Félix, Ferroviaria, Selgas-Tovar y Molina-Claret aparecen posteriormente a las anteriormente citadas, engrandeciendo la familia fallera setabense; unas con más
recursos que otras según épocas y circunstancias, como por ejemplo Molina Claret que consiguió primeros premios, como queda en la memoria de la gente el año del grandioso chino que ocupaba todo
el cuerpo central del monumento fallero. Otras como Ferroviaria se recuerdan por aquellas hermosas fallas nada voluminosas pero con un toque de acabado perfecto, realizadas por Andreu
Martorell, de Sueca.
Por último en los años setenta aparece la falla Juan Ramón Jiménez en las calles del Hort de l'Almunia y Dos Molins con unas perspectivas de futuro que ya es una auténtica realidad por
haberse transformado en un gran potencial de falleros por la gran densidad demográfica de la zona. Mantiene así primeros lugares en los distintos galardones que se otorgan. Posteriormente aparece
Abu Masaifa que no acaba de tomar la fuerza que un barrio tan poblado como el suyo presupone. Las dos últimas comisiones falleras que se ha incorporado al espectro festivo setabense han sido la
de Murta-Maravall i la del Passeig del Ferrocarril-Cardenal Serra, con ganas y juventud que las llevaran sin duda a su consolidación y a alcanzar grandes metas.
La Junta Local Fallera, es la entidad que aglutina y coordina la actividad común de las 18 comisiones existentes en Xàtiva, cuyo precursor fue inicialmente el Comité Central Fallero que se
constituyó por primera vez en la ciudad en el año 1933 bajo los auspicios del Ayuntamiento de la época. Después de algunos altibajos en su periplo por los años cuarenta y cincuenta se ha
consolidado actualmente con el patrocinio económico y tutela del Ayuntamiento, cuyo Alcalde ostenta el título de presidente nato de dicha Junta, siendo elegido por los presidentes de las
comisiones el Presidente Ejecutivo entre personas con el alta fallera en vigor.
Las fallas que se plantan en la vía pública son actualmene 18 grandes y sus correspondientes infantiles lo que lleva a un total de 36 a las que se unen las 2 municipales desde hace unos
años. También los colegios de la ciudad realizan su fiesta en tono menor, construyendo sus propias fallas y con actos diseñados al efecto, al igual que lo hacen las asociaciones de pensionistas y
jubilados, todo lo cual nos da constancia de lo enraizada que está la fiesta de las fallas en la sociedad setabense.
El programa oficial que se diseña para todo el año y principalmente en los días de la semana fallera es de lo más variado: campeonatos deportivos, de juegos de salón, Mig Any Faller,
Concurso de Teatro, Rallye, Paella Gigante, actos de las presentaciones de las distintas falleras mayores, cabalgatas, desfiles, actuaciones musicales, ofrenda de flores a la Virgen de la Seo,
Semana Cultural Fallera con exposiciones, conferencias, proyecciones, conciertos, etc., todo ello para culminar con la cremà de las fallas, acto que deja paso a un nuevo ciclo.
Josep Sanchis Martínez
La Semana Santa de Xàtiva es de las más antiguas que se celebran en la Comunidad Valenciana, puesto que con la llegada a esta población del Rey Jaime I, también lo
hicieron las imágenes titulares de la nobleza que le acompañaba: el Cristo de la Palma y La Soledad, origen de la Cofradía de la Purísima Sangre de Cristo, que preside nuestras
procesiones.
Actualmente la Hermandad de Cofradías gestiona la Semana Santa Setabense, con gran número de actos litúrgicos, procesionales y penitenciales que se programan durante la misma, y con la edición de
un cartel que anuncia al público la importancia de ésta.
Los actos comienzan con los traslados procesionales de las distintas imágenes desde el domicilio del clavario saliente al del entrante. Uno detrás de otro van realizándose sucesivamente y durante
varios días, recorriendo en su trayecto la mayor parte de las calles de Xàtiva. Se inician con el traslado del Santo Sepulcro y finalizan con las imágenes del Cristo de la Buena Muerte y Ntra.
Sra. de la Esperanza.
El pregón de la Semana Santa, se realiza normalmente ocho días antes del Domingo de Ramos, a cargo de prestigiosas personas de ámbito local y nacional.
El domingo de Ramos, se realiza la tradicional Bendición en la Plaza de la Seo, frente a la Insigne Iglesia Colegial Basílica, desde donde acompañando a la imagen de la Entrada de Jesús en
Jerusalén, los componentes del séquito, en gran número jóvenes provistos de palmas y ramos de olivo, procesionan por las calles de Xàtiva, pasando por la Alameda para volver por la Plaza La
Bassa, Españoleto y Corretgeria a La Seo.
Llegado el Miércoles Santo, se celebra la tradicional procesión de Les Cortesies, también llamada, El Encuentro entre Jesús y su Madre, de gran seguimiento por la población setabense, con las
imágenes de Ntra. Sra. De la Soledad que procesiona desde la iglesia Colegial Basílica de Santa María La Seo, con sus cofrades y la imagen del Ecce-Homo que lo hace desde la iglesia de Ntra. Sra
de la Merced con los suyos, encontrándose a las doce de la noche, junto a la antigua iglesia de San Francisco, donde la imagen de la Virgen, de forma cortés, es inclinada tres veces ante la del
Ecce-Homo en reverencia a su divinidad.
El Jueves Santo a mediodía, procesiona el Cristo de la Palma desde el domicilio del cofrade que lo ampara durante el año hasta la Iglesia Colegial Basílica. A las ocho de la noche se efectúa la
Procesión Penitencial de la Hermandad de Portadores de Nuestro Padre Jesús Nazareno con su imagen, por el itinerario popularmente conocido como Carrers de Volta con salida y entrada en la
Seo.
El Viernes Santo, a las siete y media de la mañana, se inicia el traslado del Cuerpo de Cristo al Sepulcro, partiendo de la Casa de la Ciudad o Ayuntamiento. Igualmente dan comienzo los Solemnes
Via-Crucis de las Parroquias de Xàtiva, comenzando la de San Pedro, al que sigue el de Santos Juanes y la Seo ya hacía el mediodía, para finalizar por la tarde, antes de la procesión general, con
los de La Merced y Nuestra Señora del Carmen.
Por la tarde, a las siete, se efectúa la salida de la Solemne Procesión General del Santo Entierro, partiendo de la Insigne Iglesia Colegial Basílica de Santa María, popularmente conocida como La
Seo, donde habrán sido trasladadas las diversas imágenes que procesionan en el orden siguiente:
La Procesión de Las Cortesías
En fecha desconocida anterior a 1718, los mercedarios llevaban la imagen del Ecce-Homo a la Iglesia de San Francisco. También era llevada en el mismo momento la imagen de Nuestra
Señora de la Soledad, entonces con sede en el Palacio del los Marqueses de Montortal, cofradía de la nobleza setabense, produciéndose el encuentro entre ambas imágenes a las puertas de dicha
iglesia donde eran llevadas para desde allí iniciar todas juntas la procesión del Viernes Santo. Esta coincidencia de ambas imágenes provocó se iniciara la costumbre de encontrarse y reverenciar
la imagen de la Virgen a su hijo Jesucristo. Se daba la paradoja de que la nobleza se inclinaba, aunque solo fuese por este motivo, ante el pueblo llano puesto que los componentes del Ecce-Homo
provenían de una zona de la ciudad, Les Barreres, habitada por labradores y artesanos.
Esta procesión, sigue realizándola actualmente la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad con sede en la Iglesia Colegial de Santa María -La Seo- y la Congregación del Santísimo Ecce-Homo de la Parroquia de La Merced, acompañada dels armats -soldados romanos- y de una banda propia de tambores, desfila por las calles de Xàtiva en la noche del Miércoles Santo, procesionando la primera desde la Seo por las calles San Vicente, Bruns, Segurana, Portal de Cocentaina, San Pedro, Angel, Trinitat y Montcada hasta el Portal de Sant Francesc; la segunda, acompañada de els armats y de su propia banda de tambores, configurados ambos grupos por personal de la congregación, parte de la Merced, para continuar por Taquígrafo Martí, San Jaume, Hostal, La Balsa y Sant Francesc, concurriendo ambas al filo de las doce de la medianoche en las puertas de la antigua Iglesia de San Francisco donde se reproducen las tres reverencias de rigor por parte de la imagen de la Soledad frente a la del Ecce-Homo.
En esta procesión els armats, representan al grupo de soldados pretorianos encargados de azotar, custodiar, acompañar al calvario y crucificar a Jesús realizan a la entrada y salida de la Iglesia de la Merced una vistosa instrucción militar de los tiempos del Imperio Romano, ante las andas que soportan la imagen del Ecce-Homo.
La procesión de Las Cortesias congrega a numerosos vecinos y visitantes que acuden puntual y sistemáticamente a contemplar una secuencia que se repite año tras año.
Visita a los Monumentos
La tarde y noche del Jueves Santo, día del Amor y la Caridad, después de realizados los oficios es costumbre entre los vecinos de Xàtiva guiados por la fe y también por los
curiosos, ir a visitar los llamados Monumentos.
Tres de ellos deben ser visitados. Ello es imprescindible para cumplir con la tradición, transmitida de padres a hijos. Entre los monumentos más profusamente adornados, por disponer de medios para ello, están los de la Iglesia del Convento de Santa Clara, el de la Colegiata de Santa María -La Seo-, la Iglesia de San Pedro, Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, Iglesia de Santos Juanes, Iglesia de la Merced...
El Monumento es la disposición para su exposición pública, de la custodia profusamente adornada con telas, palmas, macetas, flores y otros ornamentos y complementos, a fin
de que los feligreses puedan orar ante ella durante unos minutos.
La Pascua de Resurrección
Cuando una costumbre pagana era difícil de doblegar ante la nueva religión, ésta última adoptaba la fórmula de adaptarla a sus cultos. Así ocurrió con la celebración de la
Pascua.
La Pascua en sus orígenes era una celebración a los dioses protectores de la agricultura entre los que figuraba la diosa Ceres, a la cual se le imploraba la permanente custodia de las cosechas,
necesaria para la supervivencia. Este culto a la fertilidad aparece representado en los elementos más característicos de la gastronomía propia de esta celebración: los huevos, las longanizas, los
panquemados -mones en valenciano- de connotación y simbología erótica.
Tres son los días de Pascua que disfrutamos en Xàtiva comenzando el domingo de Resurección y finalizando el martes posterior. Durante los mismos se sucederán las comidas al aire libre, bien en
casas de campo, bien en tiendas de campaña -medio utilizado por los más jóvenes y los ecologístas- Los juegos tradicionales, olvidados durante el resto del año por la dinámica propia de los
tiempos modernos y la disposición urbanística y del tráfico de las ciudades, se ven ahora rescatados; así se vuelven a practicar juegos de antaño como el pañuelo -mocadoret-, escondite -la pit a
amagar-, la corretgeta, la rica prenda -les penyores- y sobretodo volar las cometas o catxerulos que conlleva aquí recitar al mismo tiempo aquella canción que
dice:
Un dia de Pasqua
Vicentet plorava
perqué el catxerulo
no se li empinava
Por la tarde de los días de pascua, se suele comer la mona junto con los huevos hervidos, longaniza propia de esta celebración que confeccionan las carnicerías de Xàtiva y el chocolate. Para proceder a pelar el huevo, se quiebra la cáscara del mismo estrellándola contra la frente de alguno de los presentes al tiempo que se recita aquello de:
Ací em pica,
ací em cou,
i ací et trenque l'ou.
(Del Libro Fiestas y Tradiciones de Xàtiva. Josep Sanchis Martínez y Mª Lourdes Boluda Perucho. Premios Literarios Ciutat de Xàtiva 1999. Matéu Editores. Xàtiva 1999)
La Iglesia celebra el Corpus Christi en honor al Santísimo Sacramento presente en la Eucaristía, el segundo jueves después de Pentecostés. En Xàtiva al igual que otras poblaciones, en sus
inicios, datados en el siglo XIV, constaba de un elemento pagano que desfilaba al día anterior, miércoles, conocido como la cabalgata de La Degolla, llamada también del Convit por cuanto que
anunciaba e invitaba a la festividad de la jornada siguiente, e incluso en algunos textos se le da el nombre de cabalgata dels Cavallets, por desfilar en ella este grupo de danzas. El otro
elemento era el cristiano, donde abundaban los personajes del Antiguo Testamento, junto al clero, la custodia y las autoridades.
Roberto de Torete, Obispo de la Iglesia de Lieja, inició en 1246 esta celebración, estando en el mismo lugar, de Archidiácono, Jaime Jacobo Pantaleón de Troyes, que después sería Papa con
el nombre de Urbano IV, el cual instituyó la Festividad del Corpus Christi con el fin de conmemorar el Sacramento de la Eucaristía a través de la Bula Transiturus que años más tarde es impulsada
por Clemente V; aún así hasta el año 1316 no se celebraría la primera Procesión del Corpus, hecho que tuvo lugar en Avignon, auspiciada por el Papa Juan XXII. La ciudad de Valencia organiza su
primera procesión del Corpus, el jueves 3 de junio de 1355.
Los estudios e investigaciones realizados hasta la fecha por personas preocupadas en la recuperación de las costumbres y tradiciones de Xàtiva, como Ventura Pascual, Agustí Ventura, Sebastià
Garrido y Mariano González, apuntan a que el Corpus en nuestra ciudad tuvo sus inicios en el siglo XIV, consiguiendo su mayor esplendor en el XVII y XVIII, realizándose a semejanza, en cuanto a
fasto y composición, del que se hacía en Valencia, pues prácticamente lo conformaban los mismos personajes, cofradías, misterios y danzas que procesionaban en aquel.
En 1333 se redactan, inicialmente, las Ordinaciones (conjunto de reglas) de la Cofradía de Nuestro Señor Jesucristo y la Vera Cruz de Xàtiva, que tenía su sede en el Convento de Santo Domingo;
éstas nos llegan a través de un documento que las amplía, fechado el 25 de octubre de 1381, reseñando su capítulo XXXI: Que a reverencia de Jhesuchrist sots lo qual la cofraria és intitulada, los
confrares e confraresses acompanyen lo cors preciós de Jhesuchrist a la professó ab sos ciris en les mans lo dia de Corpore Chisti et que sien portats davant aquell quatre o sis brandons
(tizones) enceses e aquell dia sien proveïts de dinar tretze pobres a honor de Jhesuchrist... De momento esta fecha es considerada como la más antigua donde se da constancia de la celebración del
Corpus en Xàtiva.
En 1406 ya aparecen consignados en la administración municipal los gastos que origina esta procesión.
Es en el año 1512 cuando se regula, a través de una Crida, en qué lugares del recorrido de la procesión o calles de vuelta y cuantas veces en el transcurso de ésta, se bailarían las danzas y
representarían los Misterios que la componían. En 1514 se firma una Concordia entre el Ayuntamiento y el Convento de Santo Domingo referente a la denominada Casa de las Rocas, lugar donde
se depositaban los carros y otros elementos, que salían en la procesión para representación de los Misterios, situado donde posteriormente fue parque de bomberos. De 1519 son las primeras normas
que regulan los vestidos que deben llevar aquellos figurantes que representen los Misterios. Avanzado ya el siglo XVI es cuando entran a formar parte de la procesión los gigantes y
cabezudos.
Del siglo XVIII se conservan relaciones donde constan las danzas denominadas dels Cavallets y dels Pastorets. En 1720 hubo en la procesión danzas, disparo de fuegos, campanas, música, misa con
sermón y olorosa enramada; cuatro religiosos procesionaron a la Virgen de la Seo, ocho sacerdotes la Custodia y otros clérigos los santos de plata recientemente restaurados; San José, Santo Tomás
de Aquino, la Virgen de la Merced y otras andas fueron sacadas por sus devotos, llevando el sacristán de San Felix la Cruz de las comunidades. Ese año pagó el Ayuntamiento por la fiesta 87 libras
más otras 147 en cera.
En 1729 pagó el Ayuntamiento por la Fiesta 173 libras, de ellas, 3 lo fueron por el primer premio a la mejor anda presentada que fue la de San Juan de Prado, de los alcantarinos descalzos de San
Onofre; el segundo premio, de 2 libras, por la imagen de la Virgen procesionada por los mercedarios del Convento de la Merced y el tercer premio se lo llevó el anda de San Felix de los frailes
capuchinos (actual Asilo).
En 1731 Don Antonio José Cebrián y Don Vicente Peris, ofrecen todas las pagas atrasadas que les debe el Ayuntamiento como regidores de la ciudad, para la construcción de nuevos gigantes.
Igualmente se conceden 12 libras para otorgar tres premios a las mejores imágenes a fin de que esmeren las comunidades y gremios en su participación en la procesión del Corpus.
En 1735 en la festividad del Corpus y su octava (ocho días antes) pagó el municipio 90 libras de la cera consumida por los 350 frailes de los conventos de la ciudad, el clero, los Cirialots,
procesión y altar. Y otras 13 libras por componer la Custodia, andas de las imágenes, campaneros, riego y enramada de las calles de vuelta, músicos, limpieza, rogativas, etc.
En 1746 por orden de D. José Povo, alcalde Mayor de la ciudad se pregona un bando en el que se comunica al vecindario que debía mantener limpio el trozo de calle de cada casa por donde pasaba la
procesión del Corpus, así como instaba a colocar cortinas, paños y otros tejidos en los balcones y ventanas.
En 1748, estando fuera del nicho la Virgen de la Seo y habiendo sido bajada la figura de San José de su Ermita, se decide que salgan en la procesión del Corpus de este año para que bendigan los
aires y den consuelo al pueblo para término de los terremotos. Este año se notó carestía en la cera por haber subido su precio debido que con motivo de los terremotos habidos en la ciudad se
consumieron cerca de 500 libras de ésta.
En 1750 se publican las Ordenanzas Generales para el gobierno político y económico de la Ciudad de San Felipe, aprobadas por el Rey Fernando VI, donde figura que para la Festividad del Corpus se
convoca à las Casas Capitulares, à las ocho, y media; y passa el Ayuntamiento à la Colegial, à las nueve, acompañado de las Danzas, y Misterios; asiste à la Missa y por la tarde, à las cinco a la
Procesión general.
En 1757 el padre Manuel Aliaga recordando que antiguamente se disponía de gigantes y cabezudos para el Corpus, regala seis cabezas de Nanos y se consignan otras 79 libras para confeccionar las
restantes y sus adornos, estrenándose en la procesión de la Virgen de la Seo del 5 de agosto de ese año.
Los costos que ocasionaba la festividad eran sufragados por el Ayuntamiento, así se pagaban cera, cuerda de campanas, música, iluminación, salvas de artillería del castillo, misa, sermón,
luminero, enramada, timbales, danzas, misterios, serpiente, la cabalgata del Convit o Degolla, Cirialots, premios, palio, llevar la Custodia, las andas y la Cruz, tropa, vergueros, etc. En 1757
consta una relación de 87 libras y 4 sueldos, junto con otra de 102 libras y 4 reales pagadas por éste, entre cuyos conceptos figuraban 1 libra, 1 real y 4 sueldos a los que llevan los timbales
el día del Corpus por mañana y tarde, Cabo de octava, y día de San Pedro, 4 libras y 16 reales por llevar los tres tabernáculos, o las 37 libras de la danseta. Llevar una vara del palio era
un honor y se las disputaban la nobleza y las autoridades. En compensación a los cada vez mayores gastos, el Corpus de Xàtiva atraía muchos forasteros a la ciudad.
En 1780 el Ayuntamiento acuerda cumplir con las premisas de la Real Cédula, que prohibía las danzas y los gigantes en las funciones eclesiásticas pero manteniendo las demás manifestaciones del
Corpus como misterios y comparsas, con una inversión de 88 libras.
En 1791 las asociaciones de los tres barrios de Xàtiva comienzan a asistir con sus guiones y tabernáculos: el de Barreras con San Matías, el de Mercado con San Isidro y el de Ciudad con San
José e igualmente concurren a la procesión las concordias de la Aurora.
En 1792 se acuerda que salga de nuevo la cabalgata del Convite o Degolla y demás danzas incluso los cabezudos, pero el gobernador suspendió el acuerdo municipal y el Ayuntamiento apeló ante la
Real Audiencia del Reino.
En 1795 se registra un oficio en donde se le dice al Corregidor Gaspar Pascual de Bonanza, que por acuerdo del Capitán General se habían dado las órdenes para las compañías de tropa que debían
acompañar al Santísimo Sacramento.
Los gremios, constituidos en Xàtiva desde principios del siglo XIV, desfilaban en el XVIII en la procesión, precedidos de sus estandartes y con las esculturas de sus santos titulares que eran
llevados en andas sobre tabernáculos; igualmente lucían sus propias carrozas, danzas y músicas, compitiendo entre sí por destacar unos más que otros; así figuraban el de zapateros con las
imágenes de sus patronos San Crispín y San Crispiniano; el de los sastres con su bandera de damasco rojo y galones de oro procesionando a las Santas Anastasia y Basilisa; los herreros con San
Eloy; los cerrajeros con San José; los molineros con la Virgen de los Desamparados; los panaderos y los estudiantes con Santo Tomás de Aquino. Continuaban los carros triunfales o Rocas sobre los
que representaban una especie de autos sacramentales conocidos con el nombre de Misterios, que posteriormente dejan de ser escenificados por personas y pasan a serlo con figuras estáticas de los
personajes que intervenían en ellos.
Siguiendo el orden ocupado en la procesión, después de los gremios, y hasta el año 1836, cuando el 19 de Febrero se decreta la Ley de Mendizábal que desamortiza y pone en venta los bienes de las
comunidades religiosas, figuraban las cofradías con los frailes de los nueve conventos masculinos existentes en la ciudad de Xàtiva en aquellos tiempos: los agustinos (Convento de San Agustín),
los dominicos (Convento de Santo Domingo), los carmelitas (Convento del Carmen), los trinitarios (Convento de la Trinidad), los mercedarios (Convento de la Merced), los alcantarinos
descalzos (Convento de San Onofre), los franciscanos (Convento de San Francisco), los capuchinos (Convento que actualmente es el Asilo de ancianos), y los cistercienses (Convento de Mont
Sant).
En 1831, un mes antes de la celebración del Corpus, y con los gastos ya comprometidos por parte de una Junta que organizaba el acto, el arzobispo de Valencia publicó una pastoral prohibiendo la
exhibición de gigantes, cabezudos, danzas, misterios, carrozas, la Tortuga y las Heroínas del Antiguo Testamento, por restar seriedad a la procesión, pidiendo la deliberación entre
autoridades civiles y eclesiásticas para determinar lo que más convenga según las costumbres sin faltar a la devoción religiosa.
En este siglo XIX salía en el Corpus de Xàtiva una gran Tortuga con la figura de San Jaime montado a caballo con espada en la mano matando a un infiel en lo alto del caparazón; era propiedad del
gremio de carpinteros; confeccionada en madera y otros materiales, iba provista de ruedas siendo arrastrada por personas desde su interior, las cuales lanzaban octavillas con poesías
satíricas escritas en valenciano, así como golosinas y también serrín, todo lo cual producía expectación y regocijo en la vecindad. El 19 de marzo de 1922, en el Bellveret, se quemó a modo de
falla esta Tortuga del Corpus dado que se encontraba desde hacía años en al Ermita de San José, arrinconada y en desuso por estar estropeada.
En 1877 después de la cabalgata del Convite o Degolla la víspera, se pasaba a realizar a las 8 de la mañana del día del Corpus una misa conocida como la de los ancianos a la que seguía a las 9 la
Misa Mayor con sermón; por la tarde, a las 6 se celebraba la procesión general figurando los gigantes, cabezudos, la fragata Numancia, la Tortuga y el carro triunfal de los carpinteros, los demás
gremios con sus santos patronos y generalmente con una banda de música acompañando cada uno. En 1888 el periódico El Clamor Setabense decía: Suntuosa ha sido este año la procesión del Corpus.
Figuraban en ella 32 imágenes con ocho músicas, distinguiéndose entre todos los gremios que han figurado en ella, el de zapateros, albañiles y molineros por su numeroso acompañamiento. Detrás de
dichas imágenes iban los que representaban las figuras del Antiguo y Nuevo Testamento, los ancianos y clero que llevaba en andas a S.D.M. Presidió la procesión el M.I. Ayuntamiento. El domingo
siguiente se celebraba el Corpus en las parroquias de la Merced, Santos Juanes y San Pedro con una misa solemne por la mañana y procesión por la tarde, acompañadas de las Bandas de Música
locales.
Entre los elementos característicos del desfile figuraban los gigantes y cabezudos. La grandiosidad de la procesión del Corpus de Xàtiva en aquellos años, hacía posible que las calles de Montcada
y Sant Francesc, entre la Plaza de la Trinitat y la actual Plaça La Bassa, estuviesen totalmente ocupadas por el séquito procesional.
Los personajes bíblicos que figuraban en el Corpus de Xàtiva eran: Noé, conocido popularmente como El Abuelo del Colomet por llevar una paloma en la mano; Tobías que llevaba un pez; San Rafael;
Josué, provisto de una espada con la que paraba el sol; los exploradores de la Tierra Prometida que llevaban un gran racimo de uvas; simbolizando la abundancia encontrada en ella; Moisés
con sus Tablas de la Ley; Aarón con el palo y una serpiente de metal; Sansón, con un león de cartón debajo del brazo; Melquisedec, con el pan y el vino; David, con un arpa; Daniel con una cabeza
de dragón; el toro y la mula; el Angel Bobo; Judit, con la cabeza de Holofernes; Rut, con un puñado de espigas; los 12 Apóstoles y junto a cada cual dos ángeles; los ancianos citados por San Juan
el Evangelista en el Apocalipsis, conocidos popularmente como Els Cirialots que en número de 24 eran representados por figurantes provistos de sotanas, barbas blancas, coronas y gruesos cirios.
Otros personajes del Nuevo Testamento que desfilaron según épocas fueron los Tres Reyes Magos con sus tres pajes con caballos y camellos de cartón; el Rey Herodes con soldados degolladores
(de aquí el nombre popular de La Degolla) dos maceros y un pregonero que anunciaba la ejecución de los niños inocentes, según lo detallado en este pasaje bíblico; también San José y la Virgen con
un borriquillo simbolizando la huida a Egipto.
Detrás de estos personajes desfilaba el cabildo eclesiástico arropando la Custodia Gótica de la Seo, donación a Xàtiva del Papa Alejandro VI; a continuación el Ayuntamiento con el Alcalde y los
concejales acompañados de la Cobla Municipal compuesta de clarines, timbales y maceros; cerrando la comitiva la música.
A comienzos del siglo XX, en 1903, el Corpus de Xàtiva inicia su decadencia; dejan progresivamente de figurar en él más de 20 personajes bíblicos de los que anteriormente lo componían, entre los
que estaban Noé, Abraham, Isaac y Moisés; los gigantes y cabezudos junto con el ángel y los ciegos se mantuvieron unos años más, para desaparecer posteriormente.
En 1911 se tratan en el pleno municipal para su aprobación las cuentas presentadas por D. Eduardo García por cera suministrada para el Corpus por valor de 425 pesetas y del alcalde padáneo de
Torre de Lloris por 37,50 pesetas ocasionadas por la celebración de dicha fiesta en aquella pedanía.
En 1920 el periódico local El Heraldo en sus notas locales decía sobre la Festividad del Corpus: Sigue la decadencia iniciada hace tiempo, en lo que de pintoresca y típica tenía la fiesta en la
calle. Dicen que son otras las costumbres y otros los gustos..."Aquel año la procesión, celebrada el jueves 3 de junio, a la que asistieron las autoridades locales, con corbata y guantes blancos,
salió a las seis y media de nuestra Colegiata, cubriendo el recorrido las fuerzas del Regimiento Otumba y con la mayoría de las casas luciendo iluminación y colgaduras. Por la mañana, la
Corporación, había asistido en la Seo a la misa de Corpus oficiada por el abad D. Pascual Bru.
En 1926 ya no se celebra la cabalgata del Convite o Degolla el día previo al Corpus. La Revista de la Unión Cultural Setabense Játiva insertaba un artículo sobre la Procesión del Corpus donde
decía: Lástima que no respondiera la realidad a las esperanzas que se tenía!. Las fiestas del Corpus en Játiva han resultado este año muy deslucidas en lo que respecta a concurrencia de imágenes.
Solamente desfilaron en la comitiva San Luís, la Inmaculada, la Virgen del Rosario y el Cordero Pascual y la Custodia... En medio de este enervamiento ha habido una nota de optimismo: la
actividad desplegada por el joven médico Sr. Ubeda y Pérez, de la Cofradía de Minerva, a los trabajos del cual se debe el que salieran los personajes bíblicos que pusieron una nota de evocación
de pasadas grandezas de esta fiesta. La procesión fue asistida por la tropa de guarnición en Xàtiva y una compañía de bandera y música cerraba el cortejo que presidían las autoridades.
Después vendría el periodo de la República y la Guerra del 36 que hicieron desaparecer completamente estos personajes, ciñéndose a la celebración en el interior de las iglesias como en 1933 lo
reflejaba la prensa local indicando como la gran jornada católica del Corpus encontró marco espléndido en nuestra Colegiata y con referencia a la misma celebración en la Parroquia de Santa Tecla
el programa contemplaba el canto de un solemne trisagio, sermón y procesión claustral distribuyendo cirios a los caballeros que desearan participar.
En los años 60 y 70 del presente siglo solamente desfilaban los cabezudos en la mañana del día del Corpus, y ocasionalmente se sacaban los gigantes pero a veces en número inferior a los ocho que
los componían por la dificultad en encontrar portadores que los llevaran o por el deterioro de los mismos.
En 1970 la festividad del Corpus se inició con un acto a las 10 de la mañana en la Plaza de la Seo donde el Alcalde Sr. Ansuátegui pasó revista a la Guardia Municipal que estrenaba uniforme de
moderno diseño para el verano. A continuación y desde el Hospital partió la comitiva de autoridades precedida de la Cobla y Maceros que hacía varios años que no salían en ningún acto oficial. En
la Colegiata ofició la misa el Abad Mitrado D. Francisco Vicedo; a las siete de la tarde se celebró la procesión asistiendo la Corporación en pleno, Juez de Primera Instrucción y Capitán de la
Guardia Civil, presidida por el Canónigo de la Colegiata D. José Soler, por haber marchado, camino de Roma, el Sr. Abad.
Actualmente la Festividad del Corpus ya no se celebra en jueves sino que ha pasado a hacerse el domingo siguiente, quedando sin efecto la orden del Papa Clemente V dada en el Concilio de Vienne
en 1310, en la que ordenaba que su celebración fuesen cinco días después de la octava de Pentecostés.
En el año 1980, el Ayuntamiento decide encargar nuevas cabezas de Nanos para sustituir a las ya viejas y deterioradas de cartón piedra, encargándoselos al artista José Martínez Mollá que las
confecciona en poliéster, recuperando así mismo la danza característica que queda encargada a la Escola de Danses de Xàtiva quien viene ejecutándola desde entonces.
Cuatro años después, en 1984 se hace lo propio con los gigantes rebajándose notablemente su peso con los nuevos materiales, dado que los anteriores, aunque venían saliendo en los últimos años, lo
hacían en precarias condiciones y no en número de ocho por haber quedado ya alguno inutilizado; así mismo se recurre a nuevos portadores que llevan éstos con más dignidad a la vez que bailándolos
más frecuente y majestuosamente.
Llegado el Corpus de 1989 aparecen en la procesión dos novedades espectaculares: las danzas de Els Cavallets y de Els Pastorets, la primera con un total de ocho componentes, con caballos de
poliéster construidos por el artista local Paco Roca y llevados por los alumnos de sexto curso del Colegio Público Taquígrafo Martí y la segunda por los del Martínez Bellver, formada por cuatro
alumnas y cuatro alumnos, por cierto que en el año 1995 es incrementada con ocho nuevas incorporaciones, pasando a ser dieciseis Els Pastorets.
En 1993 el Corpus cobra un nuevo impulso, otra vez con el apoyo de las Asociaciones de Padres de Alumnos de los colegios de Xàtiva y la predisposición de los profesores, al recuperarse nuevas
danzas como La Magrana que es bailada por los alumnos del Colegio Attilio Bruschetti; Els Arquets, danza totalmente femenina cuya ejecución queda encomendada al Colegio La Inmaculada; El
Paloteig, reminiscencia de danza guerrera que asumen los alumnos del Colegio Jacinto Castañeda; junto a estas danzas se incorporan también algunos de los personajes bíblicos que en otras épocas
formaron parte de nuestro Corpus, así Las Heroinas: Celia, Jabel, Judith y Ruth, son representadas por las alumnas del Colegio Nuestra Señora de la Seo de las Dominicas de la Anunciata y Los
Evangelistas: San Mateo, San Marcos, San Lucas y San Juan, por los alumnos del Colegio Público Gozalbes Vera, los cuales junto con la Trilogía, que escenifican alumnas del Colegio La Inmaculada,
compuesta por Abraham, Isaac y un Angel, completan este grupo, el cual desfila incorporado a la procesión religiosa y no junto al resto de componentes escolares que bailan las danzas, que lo
hacen saliendo una hora antes, diferenciando así el elemento civil, folclórico y festivo del religioso.
El año 1994, se avanzó de nuevo en la ingente tarea de recuperación de danzas del Corpus, una vez más el profesor de historia y miembro de la Escola de Danses Sebastià Garrido, impulsa el rescate
de La Moma que fue asumida por alumnos del Colegio Público Gozalbes Vera, constituyendo entre vecinos y visitantes una agradable novedad en la procesión contemporánea.
En el Corpus del año 1995, la procesión vuelve a rescatar antiguas danzas que se ejecutaban antaño como son la de Els Llauradors protagonizada por el alumnado del Colegio Claret y la de Els Turcs
que ofrecieron los alumnos del Colegio Público Taquígrafo Martí en sustitución de la danza de Els Cavallets, que era la que desde 1989 venía realizando este centro escolar pero que desde
entonces, por motivos técnicos, asumió la Escola de Danses de Xàtiva. Finalmente también constituyó una novedad la incorporación de El Dragón que en el siglo XIII ya salía representando a
Satanás, el demonio o cualquier otra idolatría, portando un estandarte del Santísimo Sacramento; este fue llevado por alumnos del Taquígrafo Martí. También se pudo observar en la calle
Corretgeria, frente al número 39 un tapiz realizado con pétalos de flores, costumbre que no se veía materializada en la ciudad. Y por el contrario, la enramada no se desparramó por el suelo de
los Carrers de Volta por donde discurre la procesión, perdiéndose tan ancestral tradición.
En el año 1996 se rescatan para el Corpus Els Cirialots escenificados por miembros de diversas Cofradías de Semana Santa de Xàtiva, los cuales en número de 24 se integran en la procesión
religiosa junto a los Evangelistas, la Trilogía y las Heroínas. Así mismo se ven después de muchos años sin su concurso, instalados en diversos puntos del recorrido de la procesión Els Altarets o
Tauletes que en otro tiempo tuvieron gran importancia entre los miembros de los conventos de la ciudad y su vecindad, así como algunos tapices de flores. Este mismo año se constituye la
Asociación del Corpus de Xàtiva, que con el patrocinio de l'Excelentísimo Ayuntamiento de Xàtiva organiza a partir de entonces todos los actos de la Festividad del Corpus, especialmente la
Cabalgata del Convite y la procesión de las danzas y demás elementos bíblicos, continuando la custodia y los aspectos religiosos de ésta a cargo del cabildo eclesiástico.
En el año 1998, continuando en el afán de llegar a recuperar todo el máximo esplendor que tubo el Corpus de Xàtiva en siglos pasados, se pudo ver en la procesión tres nuevos pasos o grupos
bíblicos, que se incorporan después de largo tiempo sin procesionar: el Arca de la Alianza, el Raimot (racimo de grandes uvas traído desde la tierra prometida) y el personaje del Rey David junto
a Betsabé.
Un elemento característico de la procesión del Corpus, es la enramada efectuada por todo el recorrido que componen els carrers de volta. Se realiza con trozos de ramas de plantas como la murta,
el hinojo, el romero, el laurel y otras hierbas aromáticas que se esparcen previamente al paso de la procesión religiosa. En ocasiones y dependiendo de la capacidad o voluntad de los vecinos por
donde discurre el séquito, se esparcen desde los balcones, que en muchas casas aparecen adornados con sábanas bordadas, unos pétalos de rosas y otras flores desparramados al paso de la
Custodia.
Veintiuno son los puntos donde los componentes de los grupos ejecutan las danzas, distribuidos a lo largo del recorrido tradicional. Se comienza a las 18,30 horas en la Plaza de la Seo y se
suele terminar, en este mismo punto, alrededor de las 22,30 horas, cuando la Custodia Procesional seguida de los miembros del clero con el Sr. Abad, la Cobla y los maceros, la Corporación
Municipal y la Banda de Música, llegan de vuelta hasta la Seo, después de haber efectuado el trayecto en sentido contrario a las demás procesiones, porque dice la tradición que la custodia, con
el Santísimo, debe entrar en la Colegiata aún con los rayos de la luz solar directa o indirectamente emitiéndose sobre ella. Encontrándose la puerta de nuestra Colegiata orientada hacia poniente,
ello origina se realice esta vuelta al revés de cómo se llevan a cabo las demás procesiones.
(Del Libro Fiestas y Tradiciones de Xàtiva. Josep Sanchis Martínez y Mª Lourdes Boluda Perucho. Premios Literarios Ciutat de Xàtiva 1999. Matéu Editores. Xàtiva
1999)
Programado durante las noches los sábados del mes de Julio de cada año.
En el marco del Castillo de Xàtiva se celebra cada año el Festival Internacional "Nits al Castell" con la participación de destacadas figuras artísticas de ámbito nacional e internacional
dentro de las artes musicales (ópera, jazz, sinfónicos, cantautores,...) escénicas (teatro de comedia, danza, fusión,...). A lo largo de las pasadas ediciones han desfilado por la
programación de "Nits al Castell", artistas de la talla de Pedro Iturralde, Lolita, Michel Camilo, Antonio Carmona, Antonio Márquez o Carmen París, y también se han representado obras
teatrales de la talla de "5hombres.com", "Nadie es perfecto", "Como abejas atrapadas en la miel",... La organización corre a cargo de la Regidoria de Turismo del Excmo. Ayuntamiento de
Xàtiva, con el patrocinio de la Conselleria de Cultura de la Generalitat Valenciana a través de Teatres de la Generalitat, Centro Coreográfico e Instituto Valenciano de la Música, colaborando
también la Diputación de Valencia, y empresas como Iberdrola y Bancaja. La gestión de la programación la realiza Obvio Producciones y la dirección artística Juan Antonio Ramírez.
Las entradas a los espectáculos incluyen el transporte de ida y vuelta al recinto amurallado, ubicado en lo alto de la montaña, que se efectúa mediante el Tren Turístico con salida desde el
núcleo de la ciudad. El recinto cuenta con servicio de cafetería y restaurante. Las entradas se adquieren, exclusivamente, desde unas semanas antes, en la Casa de Cultura de Xàtiva o dirigiéndose
telefónicamente al propio castillo.
En la ciudad de Xàtiva, cuna de los Papas Borja Calixto III y Alejandro VI, su Ayuntamiento viene instalando cada año en el mes de diciembre, desde 1991, su Belén Monumental, confeccionado
año tras año con la incorporación progresiva de nuevos elementos y figuras de tamaño natural y diversas especies de animales vivos en sus establos, como son pollinos, dromedarios, pollos,
gallinas, pavos reales, conejos,... todo este conjunto se complementa con diversas construcciones como el horno tradicional y su hornera, la noria con agua canalizada por acequias que facilita su
movimiento, las huertas, con sus siembras de coles, lechugas, ajos, acelgas.... la alberca donde pasean diversos patos, ocas y gansos de todos los colores, etc.
Los más de 1.000 metros cuadrados de belén en pleno centro de la ciudad de Xàtiva son visitados por cerca de 50.000 personas durante su permanencia, del 23 de Diciembre al 6 de Enero, con
acceso gratuito. La gestión, construcción y cuidado y mantenimiento del mismo corre a cargo del personal adscrito a la Brigada de Parques y Jardines del Excmo. Ayuntamiento de Xàtiva.
3, 4 y 5 de enero en la plaza del mercado todos los años.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR